Una traducción jurada:

Una traducción jurada, igualmente conocida como traducción oficial o certificada, es una traducción hecha por un traductor con autorización de una entidad oficial. Este tipo de traducción es de carácter legal y normalmente se requiere para documentos que son  oficiales como certificación de nacimiento, diplomas, contratos y otros…

Traducción jurada

Requisitos para una traducción sea jurada:

1. Tener autorización del traductor: primeramente el traductor tiene que pertenecer y tener los permisos de un organismo oficial así como un colegio de traductores o el ministerio de justicia.

2. Formato y Certificación: La firma del traductor debe estar en la traducción, lo que da constancia de la fidelidad y exactitud de la traducción. No obstante la mayoría de casos incluyen sellos oficiales.

3. Idioma que se utiliza: el idioma al que se va a traducir debe corresponder al país donde se va a presentar el documento.

4. Entrega Física o Digital: Según la jurisdicción, la traducción jurada debe ser entregada física con firmas y sellos originales según corresponda o en formato digital con la firma electrónica legal.

Las traducciones juradas son esenciales en procesos legales, académicos, administrativos y otros trámites oficiales, donde la precisión y la validez legal del documento traducido son fundamentaales.

En cambio la traducción no jurada es un tipo de traducción que no requiere la certificación de un traductor oficial, generalmente son utilizadas para documentos que no presentan validez legal como por ejemplo:

1. Correspondencia personal que serían las cartas, correos electrónicos.

2. Artículos y textos informativos que serían los blogs o artículos de revistas.

3. Documentos internos como informes y manuales de empresa.

A diferencia de la traducción jurada, no es necesaria la autorización del traductor ni que la traducción lleve un sello oficial ni una declaración de fidelidad. Este tipo de traducción es más accesible y rápida, aunque puede no ser aceptada en contextos formales o legales.

Las traducciones juradas son más caras que las no juradas por varios motivos:

1. certificación y responsabilidad legal: las traducciones juradas deben ser realizadas por traductores acreditados y certificados, quienes tienen responsabilidad legal por la precisión de la traducción. Por lo tanto esto agrega un nivel de garantía y confianza que no se requiere en traducciones ordinarias.

2. calidad y precisión: debido a la naturaleza legal de estas traducciones, la precisión es fundamental. Los traductores jurados deben garantizar que la traducción sea fiel y exacta al documento original, es por ello que requieren más tiempo y esfuerzo.

3. formación y acreditación: los traductores jurados generalmente deben pasar por procesos de formación y exámenes para obtener su certificación. Por consiguiente esta inversión en formación se refleja en el costo de sus servicios.

4. revisión y verificación: las traducciones juradas requieren un proceso adicional de revisión para asegurar su exactitud. esto puede incluir consultas con expertos legales y verificaciones con encargados de temas específicos.

5. formato y presentación: las traducciones juradas deben cumplir con ciertos requisitos de formato y presentación como el uso de sellos, firmas y formularios específicos que autentiquen la traducción. Por tanto estos detalles implican trabajo y costo exta.

6. demanda y oferta: hay menos traductores jurados disponibles en comparación con traductores no jurados, lo cual puede aumentar el costo debido a la ley de oferta y demanda.

7. responsabilidad y seguro profesional: los traductores jurados a menudo necesitan tener seguros de responsabilidad profesional para protegerse contra posibles errores que podrían tener consecuencias legales. el costo de estos seguros también puede influir en sus tarifas.

Pasos para escoger una traducción jurada de confianza:

1. Reputación: fijarse en las reseñas de clientes previos, traductores con buenas referencias y opiniones de la empresa.

2. Certificaciones: Asegúrate de que el traductor tenga certificación de una entidad que sea oficial o de un colegio de traductores.

3. Experiencia: Busca traductores profesionales y con experiencia en el tipo de documento que necesitas traducir (por ejemplo, legal, médico, académico).

4. Transparencia: La agencia debe mostrar claramente sus tarifas, el plazo de entrega de los trabajos y el proceso de la traducción.

5. Ejemplos de trabajo: Solicita muestras con ejemplos de traducciones ya realizadas o testimonios de las personas que han solicitado sus servicios.

6. Comunicación: Elige una agencia de traducción o traductor que tenga una buena comunicación, con disponibilidad para responder cualquier duda que pueda surgir, que tenga una atención al cliente destacada.

Buscar una traducción jurada es crucial para evitar errores de tradución.