Este artículo analiza algunos de los errores más comunes en la traducción y ofrece consejos sobre cómo evitarlos.

 

La traducción es una habilidad esencial en un mundo cada vez más globalizado.

Una traducción precisa no solo comunica el mensaje original, sino que también respeta el contexto y la cultura del idioma de destino.

Sin embargo, es fácil cometer errores que pueden distorsionar el mensaje.

A continuación te dejamos con algunos errores comunes en traducción.

 

 

Ejemplos de errores comunes

Errores comunes en traducción

 

False friends

 

Los falsos amigos son palabras que suenan o se escriben de manera similar en dos idiomas, pero tienen significados diferentes.

Por ejemplo, en inglés, “actually” significa “de hecho”, mientras que en español, “actualmente” significa “at present“.

Este tipo de error puede llevar a malentendidos significativos.

Ejemplo: “I’m actually busy” (Estoy de hecho ocupado) puede ser traducir de forma errónea como “Estoy actualmente ocupado” (I am currently busy).

 

 

Traducción literal

 

La traducción literal ocurre cuando se traducen palabras directamente sin considerar el contexto.

Este enfoque puede resultar en frases que no tienen sentido o son gramaticalmente incorrectas en el idioma de destino.

Por ejemplo, la frase en inglés “It’s raining cats and dogs” no se puede traducir literalmente como “Están lloviendo gatos y perros”.

La traducción correcta sería “Está lloviendo a cántaros”.

 

Contexto cultural

 

Cada idioma tiene su propio contexto cultural que influye en cómo se interpretan ciertas frases y palabras.

Ignorar estos matices puede resultar en traducciones incorrectas o incluso ofensivas.

Por ejemplo, en Japón es común decir “Itadakimasu” antes de comer, que literalmente significa “recibo humildemente”, pero traducirlo directamente pierde el contexto cultural de gratitud y respeto.

Sin embargo, una traducción frecuente para este contexto sería “¡qué aproveche!”, ya que en español no contamos con un equivalente fiel.

 

 

Cómo evitar errores en la traducción

 

 

Investigación y preparación

 

Antes de comenzar una traducción, es crucial comprender bien el tema.

Esto incluye investigar términos técnicos y familiarizarse con el contenido cultural del texto original.

Utilizar diccionarios especializados y consultar fuentes de confianza puede ayudar a evitar errores de terminología.

 

 

Revisión y edición

 

Revisar y editar son pasos críticos en el proceso de traducción.

Una vez terminada la traducción inicial, es útil leer el texto completo para asegurarse de que tenga sentido en el idioma de destino.

 

Consejo: Pedir a un segundo traductor que revise el trabajo puede proporcionar una perspectiva fresca y detectar errores que podrías haber pasado por alto.

 

Uso de herramientas de traducción

 

Las herramientas de traducción, como los traductores automáticos y las memorias de traducción, pueden ser muy útiles.

Sin embargo, es importante recordar que estas herramientas tienen limitaciones y no pueden reemplazar completamente la necesidad de un traductor humano.

 

Ventajas:  Aceleran el proceso de traducción y proporcionan consistencia terminológica.

 

Desventajas: Pueden cometer errores con frases complejas y no entienden el contexto cultural.

 

 

Consejos para traductores freelance

 

Traductores freelance

 

Trabajar como traductor freelance puede ser una tarea desafiante y gratificante.

Sin embargo, la independencia también trae consigo la responsabilidad de asegurar la calidad y precisión de las traducciones.

 

Aquí te dejamos algunos consejos prácticos para evitar errores comunes:

 

 

Mantén una formación continua

 

El mundo de la traducción está en constante evolución, y es vital mantenerse al día con las últimas tendencias y herramientas.

Participar en cursos de formación continua y seminarios web puede mejorar tus habilidades y conocimientos.

 

 

Utiliza glosarios y memorias de traducción

 

Crear y mantener glosarios personalizados y utilizar memorias de traducción puede ayudarte a ser consistente en la terminología y evitar errores.

Por ejemplo, herramientas como SDL Trados, MemoQ y Wordfast pueden ser muy útiles.

 

 

Especialízate

 

La traducción es un campo amplio donde encontrarás distintas áreas.

Especializarse en un área específica, como traducción médica, legal o técnica, te hará más competitivo. 

Pero además, te permitirá profundizar en la terminología y el contexto de ese campo, reduciendo el margen de error.

 

 

Realiza revisiones cruzadas

 

Una vez que hayas terminado una traducción, es recomendable revisarla desde la perspectiva del idioma de destino y comparar con el original.

Esto puede ayudarte a identificar errores que podrías haber pasado por alto inicialmente.

Consejo: Deja la traducción de lado por unas horas o incluso un día antes de revisarla nuevamente.

¡Una mente fresca puede captar errores que antes no notaste!

 

 

Gestiona tu tiempo

 

La presión de cumplir con plazos ajustados puede llevar a errores.

Una buena gestión del tiempo te permitirá revisar tu trabajo con calma y atención al detalle.

Algunas recomendaciones son Trello o Asana, herramientas que te ayudarán a organizar tus tareas.

 

 

Invierte en herramientas de calidad

 

El software de traducción de calidad puede marcar una gran diferencia en tu trabajo.

Aunque pueden ser costosas, estas herramientas suelen valer la pena por las funciones avanzadas que ofrecen.

Te recomendamos probar la versión gratuita que suelen ofrecer en su sitio web.

Así podrás comparar las distintas herramientas TAO que se encuentran en el mercado.

 

¡Gracias por leernos, esperamos haberte ayudado!